Algunas Enseñanzas del 22 de Mayo

Tras los asombrosos resultados del 22 de mayo son muchos los análisis centrados en los resultados de cada uno de los partidos contendientes. Sin embargo se trata de una buena ocasión para extraer conclusiones más globales y menos dirigidas a tal o a cual formación.
Una primera mirada nos lleva a pensar que entre los alcaldes socialistas los habría con una gestión buena, y también regular o mala. Sin embargo todos los de localidades relevantes han bajado sustancialmente. En conclusión las elecciones municipales han sido tomadas por la ciudadanía como una convocatoria en la que se medía el rechazo al gobierno de España. Sólo así se explica la uniformidad de la tendencia. Como el hecho de que unas municipales se conviertan en un referéndum sobre el gobierno central carece de precedentes en la democracia, y el levantamiento cívico del 15M también, cabe pensar que el país está en una situación muy grave o así lo perciben gran parte de los ciudadanos.
Una segunda observación es que las encuestas no reflejaron el resultado que se dio a posteriori. Ya no son fiables. Sin duda se debe a un volumen muy alto de voto oculto; también a una mayor volatilidad del voto. Una porción creciente de ciudadanos no liga ya su elección a un partido concreto. Los nuevos votantes pueden optar por distintas opciones según el momento, lo que facilitará la alternancia en el futuro.
Un aspecto muy preocupante es la entrada de BILDU como segunda fuerza más votada del País Vasco. La cuestión no es tanto si este partido es de los terroristas o no. El nudo del problema es que nadie puede creer que en el País Vasco haya 300.000 personas que estén a favor de que se resuelvan los problemas a tiros. Como es increíble concluyo que hay ciertos medios de comunicación que han estado manipulando la información ante la opinión pública del resto del país. Hay medios, creo yo, que tendrían que rendir cuentas por estas actuaciones.
Un último aspecto es el de los que confunden su victoria con el plebiscito sobre Zapatero. Les conviene no despistarse porque en estas elecciones son muchos los elegidos que jamás hubiesen ganado en circunstancias normales.