martes, 16 de abril de 2013

Cuando Caen los que Valen

La crisis está provocando la caída de numerosos proyectos y entidades. Contrariamente a lo que se suele decir, no siempre desaparecen los que menos valen. De hecho el tamiz de esta crisis es tremendamente injusto y hará declinar proyectos punteros para esta provincia. Para empezar citaremos el ADEMAR el equipo deportivo que ha puesto en el mapa a León. El Club de Balonmano, con un presupuesto moderado si se compara, se mantiene en las primeras plazas de la liga, es considerado un grande del deporte nacional y se cuenta con él en los torneos europeos cada año. León no dispone de ningún otro equipo con el nivel de relevancia mediática de éste y, sin embargo, existe el peligro de que se pierda o malbarate. La mala gestión de las administraciones públicas ha llevado a recortar, incluso con efectos retroactivos, el patronazgo, poniendo en peligro la continuidad del proyecto. Otro caso, en esta ocasión un evento deportivo, es el Campeonato Mundial de Ciclismo de Ponferrada, una convocatoria capaz de dar a conocer esta provincia como muy pocas. El cambio en el Ayuntamiento de la ciudad, cuyo exalcalde se comprometió con la planificación técnica y financiera, podría poner en dificultades la celebración de esta cita excepcional. Sería catastrófico que la ambición política truncase el primer mundial ciclista leonés. La crisis de la minería podría llevarse por delante también a la Hullera Vasco-Leonesa, una empresa que, de haber contado con el marco financiero previsto antes de la llegada de este gobierno, sería viable, dando así continuidad a un proyecto nacido en 1893. La Vasco ha sido el alma de la sociedad, la cultura y el poblamiento de la cuenca del Bernesga durante el último siglo. Ahora el incumplimiento de compromisos por parte del Ministerio de Industria pone en peligro el futuro de la entidad. En resumen, esta crisis se puede llevar mucho: malo y bueno. Por esta razón los ciudadanos no debemos ser condescendientes con los políticos sin examinar el trasfondo de sus cuestionables decisiones. No todo vale y hay que discriminar entre lo admisible -porque no quede más remedio- y lo definitivamente inadmisible.

No hay comentarios: