miércoles, 28 de diciembre de 2011

El Aeropuerto y el Nuevo Año

El año 2012 se va a librar una encarnizada batalla en torno al mantenimiento de muchos aeropuertos regionales. El de La Virgen del Camino es uno de ellos y, dado que éste es crucial para definir el futuro económico de León, nuestra tierra se juega mucho en su mantenimiento y potenciación.
El apoyo a la red regional de aeropuertos es una decisión política, como lo es el impulso al tren de alta velocidad por ejemplo. Esto permite comparar ambos medios de transporte, lo que nos conduce a conclusiones inesperadas. Y digo esto porque los costes del nuevo ferrocarril son muchísimo más altos que los de los nuevos aeropuertos y el número de pasajeros desplazados no se corresponde ni de lejos con la supuesta inversión.
Como cuestión previa hay que saber que las líneas de AVE y ALVIA alcanzan la rentabilidad en algunos casos, según informa el operador de ferrocarriles. Sin embargo tales cálculos se hacen cubriendo exclusivamente los costes operativos, es decir, salarios, consumo energético y algunos otros gastos como mantenimiento del tren. El coste de construcción se hace a fondo perdido y las compras de los trenes prácticamente también. Si tenemos en cuenta que un kilómetro de vía AVE viene costando una media de 15 millones de euros, descubriremos que 100 kms, que son necesarios para viajar casi desde cualquier capital española a otra, cuestan 1500 millones de euros. A eso hay que añadir 35.000 euros por año y kilómetro de vía para mantenimiento. Pongan luego el material rodante, unos 40.000 euros por asiento; por lo tanto un tren medio de 400 asientos cuesta 16 millones de euros aproximadamente.
Convengamos en que estas cifras marean frente a las de las inversiones en aeropuertos regionales, como los 70 millones del de León. Mucho más si descubrimos que el aeródromo dio servicio en 2010 a 93.000 pasajeros por los 137.000 del ALVIA. No es difícil intuir que cuando entre en servicio el AVE esta cifra subirá algo, pero ¿cuánto habrá costado la infraestructura? ¿Y su mantenimiento? En conclusión, ¿Cómo es posible con estas cifras que alguien ponga en cuestión la rentabilidad del aeropuerto de León?

jueves, 22 de diciembre de 2011

Caza a las Juntas Vecinales

Dice hoy el Boletín Oficial de la Junta de Castilla y León que se deniega la solicitud de los vecinos de Busnadiego, en la Tierra de Maragatos, para la constitución de una junta vecinal. Ignoro la casuística concreta de esta población del Ayuntamiento de Lucillo. No sé si la petición es justa o no, pero los argumentos esgrimidos por la Junta dicen: “la difícil vertebración territorial que supone el excesivo número de núcleos dotados de personalidad jurídica existentes en nuestra Comunidad Autónoma (con 2.248 municipios y 2.230 entidades locales menores), unido a la escasa población del núcleo interesado, debe hacer replantearse a la Junta de Castilla y León la creación de nuevos entes”.
Esto quiere decir que la Junta denegará cualquier solicitud de este tipo, ya que los núcleos leoneses son pequeños por definición. La cuestión tiene más miga por cuanto Busnadiego ya fue entidad menor, pero perdió esa condición en 1976. Los bienes que sus vecinos habían acumulado durante siglos con aportaciones individuales pasaron a engrosar los del municipio, que se ha convertido ahora en una ratonera.
Lucillo, la cabecera, cuenta con menos de 450 habitantes, por lo que nos podemos imaginar la escasa operatividad del ayuntamiento. Si una medida debiera tomar la Junta es la fusión de éste municipio con otros vecinos hasta alcanzar una cifra de población razonable. En vez de eso prefiere anular la capacidad de autogestión de los vecinos para solventar sus problemas.
Está claro que en Valladolid ni nos entienden ni quieren entendernos. Y lo peor es que entre los políticos de León actualmente no hay ninguno que se pueda considerar interlocutor en pro de nuestros intereses. ¿O sí?

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Las Centrales Térmicas de León

El debate sobre el futuro del carbón resulta importante para nuestra provincia, pero a veces oculta otras discusiones asociadas igualmente relevantes. La minería carbonífera tal y como la conocemos, estrechamente dependiente de las ayudas públicas y ligada a un notable efecto destructivo del medio ambiente, tiene los años contados. Las prórrogas que permiten prolongar la vida de esta actividad sólo se justifican por dos fines: encontrar tecnologías que permitan seguir explotando este recurso con una reducción del impacto medioambiental y a un coste razonable, y dar tiempo a la transformación de las centrales térmicas locales para utilizar otros combustibles.
En León existen tres centrales térmicas: la de La Robla, la de Anllares y la de Cubillos del Sil. Durante este año todas ellas se mantuvieron paradas o con una actividad reducida, lo que hace pensar que el Ministerio de Industria no tiene interés en la generación eléctrica con carbón. En tal escenario las plantas pueden tener la misma esperanza de vida que el sector carbonero provincial, puesto que no se pueden mantener las plantillas indefinidamente sin producción eléctrica asociada. Por añadidura resulta más rentable recibir el carbón en los puertos de mar y quemarlo allí.
En consecuencia, si no se acomete la transformación de las térmicas leonesas para quemar otro combustible, como el gas, desaparecerán y perderemos una parte importante de nuestro potencial industrial. Por eso una de las prioridades de los representantes políticos leoneses debe ser la adaptación de nuestras térmicas a un combustible alternativo.
Una segunda línea de acción para salvar las centrales térmicas de carbón es acelerar la investigación para reducir sus emisiones a la atmósfera, o bien el desarrollo de técnicas para transformar la roca en otro material que sea más fácil y barato de extraer. Ambas líneas de trabajo están todavía inmaduras y carecen de viabilidad económica.
En definitiva el futuro de las centrales térmicas de León se está dirimiendo en estos meses y debe ser un elemento central en las negociaciones sobre el horizonte del carbón subvencionado.

jueves, 15 de diciembre de 2011

El Aeropuerto: Una Infraestructura Básica

Con la crisis se ha puesto de moda tirar contra toda obra pública que no tenga el uso esperado desde el primer momento. Los aeropuertos se llevan la palma en esta revisión hipercrítica que los medios de comunicación fundamentalmente y muchos ciudadanos en su estela hacen de las inversiones realizadas en el último periodo de gobierno. Los aeródromos de Castellón, Alicante, León, o Murcia reciben ataques continuos e incluso algún extraviado clama por su cierre.
El problema que sobrevuela estos planteamientos es una falta de visión de país preocupante. Se habla de los aeropuertos como si se tratase del último equipamiento hijo de la megalomanía más absurda, pero en nada son comparables. Los aeródromos regionales son absolutamente imprescindibles como infraestructura básica en las ciudades intermedias, al igual que las estaciones de tren.
Por otra parte, consulten los viajeros de tren y comparen con la inversión exigida y el déficit acumulado, y verán que los aeropuertos resultan hasta baratos. Un problema subyacente para el despegue aeroportuario regional es que esa aviación de corto recorrido tiene casi las mismas exigencias que la internacional. Eso puede ser modificado sin que suponga fallos de seguridad. Una rebaja de las exigencias debe facilitar la entrada de nuevos operadores para terminar así con el cuasi monopolio de Air Nostrum, una compañía cuyas tarifas son un abuso en ausencia de competidores.
Esos son los problemas de los vuelos regionales y del aeropuerto de La Virgen del Camino: un sospechoso y permitido monopolio, una rigidez normativa innecesaria y una falta de visión que no es capaz de ver el tráfico aéreo como un medio de transporte básico hoy en día.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

León: La Encuesta de Población Activa

Un año más he estado contrastando los datos de la EPA del tercer trimestre del año. Las conclusiones se van acumulando tabla tras tabla y dan una perspectiva general de la marcha de las provincias de este país. Las cifras nos muestran la trayectoria desde 1981 y permiten hacer cuantos cortes temporales se quiera. Veamos algunas gruesas constataciones :
Primera: desde el año 2000, de las 7 sedes autonómicas que crecen más que la media de España, 4 son autonomías uniprovinciales. Además, las autonomías uniprovinciales como conjunto experimentan un crecimiento de su mercado de trabajo 14 puntos superior al del resto de las provincias del país, sean éstas sedes autonómicas o no. La conclusión es clara: el modelo de gestión más eficaz es la autonomía uniprovincial. El cambio institucional que se avecina debería apuntar en esa dirección.
Segunda: el mercado laboral de León pierde peso relativo de manera continuada y ya no alcanza el 1% del total nacional. Por otra parte, 32 provincias pierden peso desde el año 2000, lo que significa que la oferta de trabajo cada vez se polariza más en unos pocos centros. De las provincias cercanas sólo Cantabria y Burgos ganan peso. El resto de Galicia, Asturias, León y Castilla se desinflan. En conclusión hay que exigir con mucha seriedad a nuestros políticos que hagan algo o se marchen a su casa porque la estructura que tenemos actualmente en el noroeste de España no es competitiva, ni adecuada, ni se ajusta a nuestras necesidades, salvo que queramos emigrar todos a Madrid, que ya reúne un 15% largo de la oferta laboral, o a otras provincias medias emergentes como Lérida, que algo están haciendo bien.
Tercera: si el núcleo norteño que forman Cantabria, Burgos, Logroño y Navarra se comporta bien –no así el País Vasco-, alguien tendría que ocuparse de saber cómo se hacen las cosas allí para trasladarlas y, de la misma manera, intentar parecernos lo menos posible a Galicia. La gestión no puede ser la misma con resultados tan dispares.
Ahora ya sabemos quién es quién referiéndonos a las provincias y a los resultados de gestión. ¿Por qué no se intenta aprender de los mejores?

jueves, 8 de diciembre de 2011

La Promoción Turística y los Iconos

La Diputación ha presentado en INTUR una nueva marca para promocionar el turismo en la provincia: “León, naturalmente”. Según parece, la idea es basar el argumentario de la campaña en un punto fuerte: que León es la provincia española con más reservas de la biosfera. Sin duda es una forma de dar valor a la esplendidez de la naturaleza provincial utilizando las figuras para su protección que así lo reconocen.
La idea es a priori buena, aunque todo depende de cómo se hagan las cosas. De momento no han empezado bien. En una edición muy devaluada de INTUR, la feria del turismo interior, todo el material disponible era un díptico de la campaña, algo que por su pobreza y falta de impacto sorprendía al público y al resto de participantes en la convención. En todo caso, la inclusión de la capital en el consorcio provincial debiera suponer un aumento de recursos dedicados por esta entidad a la promoción de León, lo que hace inexplicable tanta pobretonería.
Sin embargo no es este aspecto puntual el más preocupante. Si el leit motiv ha de ser “León, naturalmente”, pues sea. La cuestión es que de una vez se defina cuál va a ser la imagen de marca de León para los próximos ocho o diez años. No podemos pasar la vida cambiando la base de una campaña promocional al ritmo de la última ocurrencia del gobernante de turno. Marcas como “Asturias, Paraíso Natural” nos muestran cuál es el camino a seguir: continuidad, profesionalización y recursos económicos en cantidades suficientes. León tiene que dar un giro a su gestión turística porque las campañas lanzadas hasta ahora han sido irrelevantes y eso lo dice todo sobre su idoneidad.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

León y la Música

La capital leonesa se ha llenado de actuaciones musicales un año más con motivo del Purple Weekend. Se trata de un festival de música moderna en torno al estilo “mod”, pero abierto a otras tendencias. La cita ha mantenido una continuidad encomiable lo que ha provocado que, pese a los recortes económicos, siga siendo una referencia para todos los aficionados.
Al igual que el Purple, existen en León unas cuantas convocatorias musicales consolidadas a lo largo de los años: el Festival del Órgano de la Catedral o el Festival de Música Española son buenos ejemplos. A estos acontecimientos se suman otros menos normativizados o con menos tradición, pero siempre en torno a la música: el festival de jazz, el festival de música celta, la programación del auditorio o los conciertos organizados por entidades privadas como la Fundación Eutherpe o Studio 54. De esta manera el año se cubre con una densa oferta musical que cubre la mayor parte de los estilos.
Se puede decir que son muchas las ciudades con este tipo de oferta, pero también se puede afirmar que no hay ciudades de las dimensiones de León con una programación similar en cantidad y calidad. Además la respuesta del público local es sobresaliente. En consecuencia podemos decir que la densa programación musical leonesa bebe en la propia idiosincrasia de la ciudad, que cuenta también con una orquesta clásica compuesta por aficionados, pero con una sonoridad excelente, una escuela de música moderna municipal y un abultado y variopinto censo de grupos musicales.
León es una ciudad musical, aunque quienes vivan aquí no se den cuenta. La música es un recurso y la urbe no lo está utilizando como tal para atraer visitantes. Por esta razón el municipio debería establecer un calendario musical, incluyendo todos los festivales y actuaciones que sea posible conocer con anticipación. El catálogo debería estar a disposición del público durante todo el año en los hoteles, bares y restaurantes. De esa manera se conseguirían dos cosas: que los leoneses tomen conciencia de una de las peculiaridades más hermosas de la ciudad y que los visitantes tengan un motivo más para volver.

viernes, 2 de diciembre de 2011

La Regeneración del PSOE Leonés

El PSOE leonés vive unos días de debate y convulsión. Una parte de la agrupación leonesa reclama renovación después de que el partido experimentase unos resultados electorales desastrosos. La cuestión es si la renovación que reclaman los críticos es la que necesita el socialismo.
Los planteamientos de los que piden cambios parecen ir más hacia la sustitución de personas que de ideas. Algunos de los críticos, como Miguel Martínez por ejemplo, son militancia de toda la vida que ha estado en la primera línea del partido hasta ahora. Por eso choca que sean éstos quienes piden renovación escudándose en un grupo en el que, es cierto, hay algunas caras nuevas. Da qué pensar que la supuesta renovación pueda convertirse en un quítate tú para ponerme yo.
Las causas de la profunda crisis que atraviesan los socialistas tienen mucho que ver con los valores que han abanderado con sus hechos. Bajo mi punto de vista, en el PSOE existen personas de una valía profesional e intelectual muy importante, pero en general han quedado relegadas a un plano secundario por una marea de oportunistas y medradores de pasillo que, para colmo, han resultado unos iletrados. La corte de los bachilleres en que se convirtió el círculo de poder de Zapatero, plagado de personas sin preparación adecuada, es la causa profunda del fracaso socialista. Su traslación a nivel local ha dado la puntilla al socialismo leonés.
Desde luego Oscar López, al que no se le conoce una sola aportación relevante en debate alguno, no parece la lumbrera que vaya a sacar a los socialistas leoneses de su purgatorio. O acomenten esta crisis con una vuelta a los orígenes -personas relevantes, debate e ideas- o mucho les queda para atravesar el desierto.