jueves, 8 de abril de 2010

Polémica Gestión en la Diputación

La Diputación de León se aproxima al final de un mandato que pone en tela de juicio su condición de garante del mundo rural leonés. La gestión en demasiadas facetas está dejando mucho que desear.
El apagón de la televisión analógica es un ejemplo de lo que decimos. Que a estas fechas haya gente sin televisión en la provincia porque la Diputación esperó pasivamente al final de las emisiones no tiene disculpa. No se pusieron medios extraordinarios conociéndose con muchos trimestres de antelación que esto se podría producir. Ya pasó lo mismo con la cobertura telefónica.
La gestión de las basuras se ha revelado lamentable, sin reciclado correcto y con ciertas contrataciones inexplicables de personal con alta remuneración. Eso por no hablar del escándalo de los exámenes de selección en la propia institución, trufados de familiares de políticos populares sospechosamente aprobados, cuestión que llegó a los juzgados.
El consorcio del aeropuerto, desde el relevo de Majo y la retirada de Pardo es la historia de un estancamiento. La gestión turística es vulgar, puro continuismo de labores hechas hace años. El episodio del medio millón de euros para remozar los despachos de los diputados populares en medio de todo lo anterior resulta escandaloso. Como los injustificados viajes a Argentina de la presidenta y su séquito.
En fin, o mucho se esmera este equipo de gobierno en el año que les queda o pasarán a la historia como uno de los peores que por la Diputación de León hayan pasado.

2 comentarios:

Alfonso Mielgo dijo...

Si es que la Dipu no sirve para nada... vaciada de competencias y de financiación... ¿nadie audita a esta gentuza?, ¿cuál es la función de un diputado provincial?... eso sí, los gastos son tremendos, y productividad o resultados, cero.

Se queda en una mera administradora de pequeñas subvenciones de fondos que le llegan... qué tristeza... luego van por las ferias de los pueblos vendiendo la moto... "la presidenta"... ¿pero de qué?, ¿que coño preside?, ¿la comunidad de vecinos?

Lo de las Autonomías y Diputaciones tiene que romper... no hay manera de soportarlo

Anónimo dijo...

Las Diputaciones son un "cementerio de elefantes" para cargos municipales y autonómicos. Retiros dorados y nidos de nepotismo. El funcionario que consigue entrar en una diputación tiene "la vida hecha". Y es dificilísimo entrar desde la calle. Lo sé porque me muevo profesionalmente en el ajo. Ahora, eso sí: Si se mata la Diputación se mata la provincia. Esto, en unas regiones como p.ej.Galicia o Asturias, donde la gente tiene una identificación muy fuerte con la región,no tiene la menor importancia, o muy poca. Pero en las autonomías del interior de España, donde no existe sentimiento regional ni apego a la comunidad autónoma, sería otra historia. La gente de la España del interior se siente vinculada al pueblo y a la provincia (y gracias), y si desaparece alguno de esos dos, veremos, veremos... (siento decirlo, pero por no haber sentimiento regional, no da ni para una región castellana o una región leonesa, ambas por separado). La provincia es un agarradero fundamental en la cabeza del personal. Otra cosa es una limpieza de arriba a abajo y a veces entrando con lanzallamas, incluso hacerlas adelgazar con 4 competencias, pero reales. Pero matarlas no.