jueves, 3 de junio de 2010

Más sobre las Fusiones Municipales

Finalmente se ha desatado el debate sobre la racionalización de las administraciones públicas. La presión que ejerce la crisis no podía concluir de otra manera: así aparece en la hoja de ruta del Fondo Monetario Internacional, que tan bien conocen los griegos.
Más allá de a qué obligue el Fondo Monetario Internacional, la fusión de ayuntamientos en León era una necesidad creciente hace mucho tiempo. No existe justificación para el mantenimiento de municipios que apenas pueden costear sus gastos de funcionamiento; no hablemos ya de las inversiones. Por ejemplo, 18 de ellos en León ni siquiera han podido acudir al plan de inversiones de la diputación, que les solicita un exiguo 20% del coste de la obra. ¿Qué da sentido entonces su existencia?
Lo incomprensible del caso es que ciertas autoridades tomen posición en contra de esa reordenación municipal. Cuando se examina quiénes son, sus argumentos quedan en evidencia: o son alcaldes que podrían perder el preciado trono o son los jefes de partido locales, a los que crearía un problema por expulsar a sus seguidores de las redes clientelares, redes mayoritariamente adscritas a los ayuntamientos.
En esta ocasión los ciudadanos han de defender su derecho: el de que sus impuestos se utilicen con mesura, honradez y eficacia. En consecuencia no se puede permitir que los opuestos a la fusión se atrincheren en cuestiones de método. Si las leyes no lo permiten, que las cambien y, si lo permiten, que ejerzan, o que se vayan.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Todos queremos fusiones de municipios mientras no afecten al nuestro.