jueves, 31 de mayo de 2012

Banqueros, Responsabilidades y Recortes

El escándalo de BANKIA ha trastocado el ya inestable equilibrio de las finanzas públicas españolas. Es la evidencia de cómo una élite es capaz de provocar graves daños al interés general cuando está integrada por personas sin la formación suficiente, sin la profesionalidad adecuada y sin los escrúpulos imprescindibles.
El escándalo de BANKIA no es diferente del de Caja España-Duero, no se engañen; lo que cambia es la dimensión. Si con la caja de ahorros de aquí se puso de rodillas al Banco de España para hacer aportaciones fuera del guión para que Unicaja cargase con el muerto, con Caja Madrid se ha puesto a todo un país de rodillas para pedir ayuda externa a los fondos europeos, porque el Banco de España se queda pequeño.
Entre tanto continúa la oleada de recortes: los chicos de secundaria de Valdeón y Riaño tendrán que bajar a Cistierna porque no hay un duro para mantener su centro educativo abierto; en Ponferrada cierran 54 camas del hospital; la minería no recibirá los fondos comprometidos o la Peregrina sigue vacía, sin dotación que la equipe después de su restauración. Y ahora van a por todos ustedes, señores de León. Todo esto por culpa de unos pocos aquí, en Madrid, en Valladolid y otros sitios que actuaron con falta de celo y de decencia, como poco a poco se va descubriendo.
Y en esto surge la pregunta de a qué se dedicaban los órganos de control: el Banco de España, el Tribunal de Cuentas, la Fiscalía del Estado, etc. Pues seguramente tomando el sol, en sentido figurado, con el señor Dívar. Como consecuencia en Europa han decidido que no somos de fiar. Y digo yo, aunque ya son muchos más los que lo repiten ¿es que nadie va a ir a la cárcel por participar en la preparación de la crisis más grave de España desde hace muchos decenios?

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