miércoles, 17 de octubre de 2007

Valladolid: Barra Libre

En León se tiene conciencia de que la Junta hace un tratamiento deliberadamente abusivo de la Provincia de Valladolid respecto a León. Sin embargo a la población vallisoletana no parece constarle tal vulneración y sólo limitadas capas de población lo apoyan conscientemente.

Si en una primera etapa la Junta actuó erosionando la economía empresarial leonesa induciendo un traslado sistemático de sedes empresariales -para lo que utilizó dinero público en forma de subvenciones-, pasó a una segunda fase en la que el gasto público autonómico en el entorno pucelano se desmadró. De esa etapa son la reforma del Hospital Militar, la autovía de Boecillo o la recuperación del Patio de las Francesas. Este proceso está a punto de completarse en lo fundamental con la construcción del complejo de la Villa de Prado, donde las inversiones rebasan los 15.000 millones de las antiguas pesetas.

En la fase que parece iniciarse ahora se quiere cerrar la cuestión de la capitalidad autonómica. Esto deriva de que Valladolid ciudad no es la capital de la Autonomía. En esta comunidad no existe capital porque no se ha podido aprobar una ley al respecto. Este hecho es consecuencia de que en la creación del ente autónomo se pactó el reparto de sedes y la no declaración de una cabecera.

Fue durante la presidencia de Aznar donde se rompió tácita y unilateralmente este pacto, y Valladolid comenzó a funcionar como un acaparador de recursos de todo tipo. Desde entonces se cita en documentos de la propia Junta a Valladolid como capital y no se hace esfuerzo alguno en corregir el error.

En definitiva, por la vía de los hechos se ha concedido a Valladolid una relevancia que no se consensuó con nadie. Ahora asistimos al intento del PP de colar la capitalidad pucelana en la reforma estatutaria. En la misma dinámica encontramos que el mismo torneo de tenis que se celebró en León sin ayuda autonómica, se va a celebrar en Valladolid con dinero del ente; un concierto de rock multitudinario va a recibir fondos autonómicos también; el teatro Zorrilla, de la Diputación de Valladolid, se recupera con financiación autonómica; y así, suma y sigue. Montar un ciclo de conferencias en Valladolid es una trivialidad en términos de concesión de ayudas de la Junta, pero se convierte en una carrera de obstáculos si es en León.

En la etapa actual se continúa atacando la economía leonesa: no hay fondos para la Catedral, ni para las necesidades de las Médulas, menudean las invitaciones para trasladar empresas, se hace el vacío al Parque Científico, se retrasa el módulo cubierto de atletismo y, ahora, el Cylog, margina el potencial logístico de León.

Valladolid se ha convertido en la representación de un ataque permanente a los intereses de León. La Junta está induciendo al enfrentamiento.

2 comentarios:

Alfonso Mielgo dijo...

El problema, en parte, es que desde siempre se ha vendido que somos una única región, y que León fué un reino hace 1000 años, así que la población piensa que "todas las ciudades, hasta Palencia, tienen mucha historia y no por eso son autonomías", o no entienden lo de Castilla y León "porque Galicia es Galicia, no Galicia y Orense... demasiado que se les deja poner el nombre"... ahora bien, no toda la culpa es de los vallisoletanos, que normalmente están desinformados y hacen bien en defender lo suyo (los carteles de obras financiadas por la Junta son muy numerosos, pero hasta que no ves que a castillos y catedrales de otras provincias se les niega el pan y la sal, no tomas conciencia de ello). Para ellos, si Valladolid es la capital (a mi es lo que siempre se me dijo en el colegio desde la EGB)lo normal es que las sedes estén allí y no entienden las quejas de León.

Opino que si León no es autonomía es por demérito de los propios leoneses, que nos hemos dejado maniatar estúpidamente como buenos chicos, los políticos no son nadie para pactar nada, eso son excusas, el problema es que nadie quiere mojarse, tampoco exigir a los políticos, somos cómodos y así nos va... no basta con denunciar en una rueda de prensa (que antes ni eso) ¿se imagina que ese pacto de Martín Villa ocurriera en cualquier otra región? tendría consecuencias muy graves para ese señor...

Tampoco dominamos la comunicación... deberíanmos aprender de la notoriedad que genera Greenpeace (no lo digo yo, su caso se estudia en todas las escuelas de negocio)

Cisastur dijo...

Comparto tus comentarios sólo en parte. La educación escolar borrando el rastro de León aparece con la transferencia a la comunidad autónoma de la educación. De entonces procede esta tergiversación, no de antes. Contra eso se lucha con formación e información.
Valladolid no es capital más que de su provincia. Sí que es la guarida donde esta élite caciquil guarda su botín (instituciones, tratos de favor, empresas beneficiadas, etc). El tiempo colocará a cada centro urbano en su lugar.
León no es autonomía porque el aparato del estado lo impidió. Eso carece de precedentes. No busques más explicaciones. En ningún lugar de la península se ha registrado más resistencia a la configuración autonómica que aquí. La diferencia es que, para orgullo propio, aquí ni matamos a nadie, ni dejamos que otros lo maten, ni quemamos autobuses. De todos modos las cosas se están llevando a un punto desde Valladolid en que se suceden las provocaciones más descaradas. Ya veremos en qué acaba.
En cuanto a la comunicación, todo se aprende. Este es un movimiento ciudadano que nace espontáneamente bajo el paraguas de dos caciquillos (uno primero y otro después) a los que el tema se les fue de las manos sucesivamente.
Ahora es una fuerza fuera de control y eso produce mucho desconcierto, pero hay gente que está aprendiendo a hacer las cosas. En cualquier caso el leonesismo ya no tiene marcha atrás.
Gracias por tu intervención.