miércoles, 11 de julio de 2007

Deficiencia Hospitalaria

Una de las carencias importantes que presenta la provincia leonesa es la calidad de sus hospitales públicos. Se trata de un aspecto central de las dotaciones del que pocas veces se habla, pero supone un factor sobresaliente de atractivo o rechazo de un territorio. La Junta de Castilla y León es la responsable de las políticas en este apartado.

León es la provincia con más demanda hospitalaria de la comunidad autónoma, ya que se trata del territorio con más personas mayores. La cúspide del sistema hospitalario leonés es el complejo de la capital. Se trata de un edificio fruto de la adición de otros dos, más antiguos, y de áreas nuevas que enlazan ambos. La estructura de esta amalgama está condicionada por la ubicación previa e independiente de los hospitales Princesa Sofía y Virgen Blanca. Por ello el nuevo proyecto ha tenido que someterse más a criterios arquitectónicos que sanitarios. En otras palabras, un nuevo hospital que hubiese sustituido al antiguo complejo habría presentado un diseño diferente del que finalmente se le ha dado al hospital de León.

Una cuestión llamativa es la enorme cantidad de espacio construido dedicado a pasillos y áreas de tránsito. Es una queja general de los trabajadores del complejo los grandes desplazamientos necesarios para ir de una parte a otra. La circunstancia tiene aún menos justificación si se piensa que predominan las personas mayores entre la población demandante de asistencia. Para este colectivo el movimiento por la intrincada red de pasillos y estancias supone una dificultad casi insalvable. En resumen, el Hospital de León tiene una gran cantidad de espacios sin función sanitaria, edificados con el único fin de enlazar los dos núcleos del proyecto: las torres de los antiguos hospitales.

A esta ineficiencia se suma la demora enorme en la ejecución de la reforma. A día de hoy el viejo hospital Virgen Blanca permanece intacto. Sus habitaciones son anticuadas y la baja calidad residencial contrasta marcadamente con la del Princesa Sofía. Es difícil encontrar un hospital público tan deficiente. Esto parece incomprensible si se piensa que las obras comenzaron a finales de los años noventa.

Podríamos tocar otros aspectos como la dotación de personal, que suple con su dedicación las carencias, y la de medios diagnósticos, peor que la de provincias con menos necesidades, pero eso es tema para otra columna. Mientras tanto cabría exigir a la Junta responsabilidades por una gestión tan fallida, ineficaz y discriminatoria con la provincia de León. En definitiva se hace imprescindible un cambio en la inversión, ejecución y dotación que venga a subsanar este grave déficit hospitalario tras una decisión errónea: acometer la reforma del complejo hospitalario en vez de la construcción de uno nuevo.

No hay comentarios: